Elvis estuvo en Formigal, en el BMW Riders 2012

Mi mes de estancia en Brazzaville, la capital de la República del Congo, estuvo lleno de experiencias.

Algunos me han preguntado que qué hacía para no aburrirme mientras esperaba el visado para pasar a la República Democrática del Congo. No me aburrí ni un segundo. Conseguir el visado fue una cuestión de tenacidad y fe. Cada día me presentaba por la mañana a la embajada con la intención de que mi petición escalase siempre una posición más. De Lunes a Sábado, me pasaba de cuatro a ocho horas dentro de ese edificio. Me hice amigo de todo el personal de la embajada, del primero al último. Desde el guardia de la puerta de entrada hasta el embajador y su padre. Cuando me veían sentado en la sala de espera me ofrecían refrescos y comida. Ellos hacían todo lo que podían para ayudarme y yo lo sabía. Había gente que me decía que perdía el tiempo y que estaban jugando conmigo, pero lo cierto es que se trataba de un giro político de la RDC que afectaba a la burocracia fronteriza.

Cuando salía de la embajada me iba a hablar con los overlanders acampados en el Hippocampe, un hotel con espacio para plantar la tienda de campaña. Los overlanders podían acampar gratis e incluso utilizar la ducha. Las charlas las acompañábamos con cerveza bien fría.

Después de los 400 km de barro durante el trayecto de Dolisie a Kinkala, noté algún cambio significativo en el comportamiento del motor de la Zebra Roja. Probablemente los síntomas se debían a la mala calidad del combustible que la máquina estaba tragando desde que pisó África.

La moto necesitaba un cambio de aceite y filtro, y también un reglaje de válvulas. Le comenté a Olivier, el dueño del Hippocampe, que seguramente necesitaría la ayuda de un mecánico para revisar bien la moto.

- "El jefe de la policía especial del presidente es también un mecánico experto en motos BMW. Se llama Elvis", me dijo Olivier.

Curiosamente ya ha había oído hablar de Elvis. En alguna otra ocasión ya pregunté a algún policía motorizado, que me habría informado de que el tal Elvis conducía una BMW R1100 RT.

Al cabo de unos días, cuando estaba dando una vuelta en moto por la ciudad, en una calle ancha, divisé lo que parecía una RT. Alcancé a la moto y a su piloto y saludé.

- "Hola, ¿eres Elvis?".

- "Sí, soy Elvis".

- "Tienes una moto fantástica y suena perfectamente!".

Agradeció mi comentario y me regaló una maravillosa sonrisa. Elvis es un tipo de esos con mucha presencia. Me indicó dónde podía encontrar aceite para motor de calidad y me dio su teléfono.

- "Llámame durante la semana y quedamos en el Hippocampe para mirar la moto juntos", me dijo.

Y así lo hice.

A Elvis le fascinan los motores boxer. En la presidencia tienen varias motos BMW R1200 RT y él es el reponsable de su mantenimiento. De hecho, hasta tienen un taller completo con máquina de test oficial de BMW y almacenan, también, algunos recambios necesarios para el mantenimiento de las motos.

En plena zona de acampada del Hippocampe, Elvis, ni corto ni perezoso, se pone manos a la obra. Prácticamente no me deja hacer nada. Él se encarga de todo. Me dedico a observar con qué delicadeza Elvis trata cada pieza de la moto.

El trabajo nos lleva unas tres horas. Elvis ha querido, también, enderezar las defensas de la moto y las ha dejado perfectas. ¡Ha quedado perfecta!

Le invito a comer en el restaurante del hotel. El precio es bueno y hacen una rica cocina vietnamita. Olivier es francés y su mujer es de Vietnam.

Elvis también quiso ayudarme para solucionar el tema de mi visado. Desgraciadamente, las dos últimas semanas en Brazzaville fueron de caos y tristeza. Una explosión en un depósito de armas arrasó a un barrio entero y se llevó a cientos de vidas. Fue muy duro para los congoleses.

El Brazzaville pude alojarme en casa de la hermana de Toni, un amigo de Barcelona. Su hermana trabaja en la embajada europea. Una semana antes de la BMW Riders 2012 en Formigal, en donde participé como conferenciante y organizamos un sorteo Ride To Roots para conseguir fondos para Riders for Health, Toni me envió un mensaje.

- "Tendrás una sorpresa en Formigal. No te puedes imaginar de qué se trata".

El Sábado por la mañana, Simona y yo, nos encontrábamos en el stand de Ride To Roots, cuando de pronto veo llegar a... Elvis!!! ¡No podía creerlo! Nos dimos un fuerte abrazo. Elvis tuvo la oportunidad de viajar a España y se fue unos días de ruta con Toni. Quisieron venir a Formigal a darme una sorpresa y, desde luego, lo lograron.

Elvis es de esa clase de personas que uno siente que lo tiene a su lado siempre, a pesar de la enorme distancia física. Nunca olvidaré lo que hizo por mí y nuestras charlas sobre la vida. Tiene un punto de vista muy optimista y real sobre el mundo.

Espero que nos veamos pronto, amigo mío. :)